Como sobrevivir al calor del verano al volante

Como sobrevivir al calor del verano al volante

Un día de agosto cualquiera. En torno al mediodía. Se podría freír un huevo en el asfalto. Tu coche aparcado en medio de un descampado. Tienes que subir. No quieres morir de calor instantáneamente. Abres la puerta. Sale fuego del interior. Tocas el volante, hierve. Tocas la palanca de cambios, quemadura de tercer grado… El horror.

Seguro que has vivido más de una vez esta secuencia de hechos durante el verano. Nadie se libra de pasar calor al volante durante los meses estivales. En este artículo te vamos a dar algunas ideas para que el interior de tu coche no sea un infierno, así como consejos de conducción para estas fechas con altas temperaturas.

A la sombrita se vive mejor

Parece una obviedad, pero el primer paso para que el coche no se convierta en el infierno mismo es intentar aparcar a la sombra. Eso implica un pequeño esfuerzo, ya que no debes conformarte con el primer sitio que encuentres si este está a pleno sol.

Bendito parasol

Era todo un clásico en los años noventa y principios de los dos mil pero se está perdiendo poco a poco: el parasol reflector para el parabrisas delantero para evitar el calor al volante.

Se trata de la superficie acristalada de mayor superficie de todo el coche y el efecto invernadero que provoca es potente. El parasol mengua la entrada de rayos de sol, además de reflejarlos.

Por lo tanto la temperatura bajará unos grados, además de conservar mucho mejor los materiales del habitáculo, en especial cueros y plástico.

Ventilación del habitáculo

Aunque fuera haga mucho calor, baja las ventanillas cuando comiences a moverte antes de poner el aire acondicionado para expulsar el aire caliente del habitáculo. Espera siempre un par de minutos antes de conectarlo. El gasto de energía por tu parte de tu coche será mucho mayor si no has expulsado antes el aire caliente del interior.

Otro truco más rápido es abrir la ventanilla delantera del copiloto, y abrir y cerrar enérgicamente la puerta del conductor varias veces. De esta forma se crea un vacío y posterior presión que empujan el aire fuera del coche por dicha ventanilla.

Trucos para evitar quemaduras

Evita quemarte las manos y el calor al volante de una forma muy sencilla. Al aparcar y detener el vehículo, gira el volante de manera que la parte superior quede mirando hacia abajo.

Así recibirá mucho menos calor del parabrisas delantero y la temperatura será inferior. Si tampoco quiere quemarte las posaderas y las piernas, es tan simple como colocar una manta, toalla, o tela de densidad media encima del asiento para que absorba gran parte del calor. Cuando te sientes, la sensación no será de quemazón.

La tecnología al rescate

Este punto es solo aplicable a coches con una tecnología avanzada, y por lo tanto precio elevado. Algunos modelos cuentan con funciones para controlar el aire acondicionado a distancia.

Esto se hace mediante aplicaciones de móvil que te permiten tener el coche en un punto óptimo de temperatura, minutos antes de que te subas en él.

Conducir con chanclas y camiseta

Al contrario de lo que mucha gente se cree, no está expresamente prohibido conducir con ellas. Eso no quita que si no tienen más de dos puntos de sujeción, no sean muy recomendables para conducir.

No es el calzado ideal para conducir en ningún caso, ya que se pueden resbalar o incluso quedarse atrapadas entre los propios pedales.

Aunque el calor al volante sea intenso, ir sin camiseta no es buena idea ya que no experimentarás más frescor, además de arriesgarte a quemaduras por abrasión con el cinturón de seguridad.

Tampoco te olvides las gafas de sol. No son obligatorias en ningún caso, pero muy recomendables en esta época para evitar el sol de cara o reflejos en el asfalto.